LA LITERATURA
EL SIGNO
Ángel Contreras
Fuente de información temática, ensayo de Raúl H Castagnino, “Qué es la literatura”. Editorial Nova. B. Aires 8 edición.
La palabra escrita ofrece un carácter silencioso pero con poder, que obliga a participar de un misterio y de un milagro. El cambio de sustancia-“alquimia del verbo. Metamorfosis de la realidad” cuerpo, volúmenes, cosas, emociones. Símbolos evocadores: señales que
despiertan imágenes equivalentes a las reales, aunque distintos de ellos; que crean una realidad aparencial.
despiertan imágenes equivalentes a las reales, aunque distintos de ellos; que crean una realidad aparencial.
El cambio de sustancia que concierne a la esencia de lo literario, tiene una dimensión propia, sin la cual no puede existir la literatura.
La pintura y la poesía. En la primera, formas y colores quedan encerrados en el espacio; en la segunda, los sonidos articulados se suceden en el tiempo. La pintura expresa objetos, la poesía expresa acciones
LA LITERATURA
ACCIÓN
Sobre el papel impreso, un poema o una novela, no son sino escritura, cosa. Resultado de su creación por el autor; de su recreación por parte del lector.
La obra lleva consigo la voz que viene y la voz que debe venir. Y esta voz debe ser la que se imponga, la que excite el estado emocional.
El lector, en cambio, siguiendo la sucesión de signos, deberá recrear en su mente el paisaje literario, con la evocación de los elementos de la naturaleza transformados en signos dados por el literato en un orden. Sucesión y desarrollo. La expresión por medio de la palabra sólo puede dar una cosa por vez y una detrás de la otra.
