ALEGATOS martes 13 de septiembre del 2016
ALEGATOS
Hay mucho que decir sobre la curiosa actitud de muchos, legos y expertos, que ven en el Quijote una obra compasiva y humana: la burda farsa medieval.
Cervantes nos muestra su personaje describiendo detalles desagradables que considera necesarios para refutar a los defensores de la sana diversión, de la risa benévola.
Véanos como viste: Jubón ajustado de piel de gamuza con pocos y desiguales botones, todo mugriento. La lluvia se cuela por los agujeros de la armadura. Calzones pardos y estrechos, medias de seda verde, zapatos de color de dátil.
La armadura de don Quijote es vieja, renegrida y mohosa, el escudo sobre su brazo y una rama de árbol como lanza. Su Rocinante, un ejemplar macilento, cuellilargo y bondadoso con la misma mirada pensativa y el mismo talante flemático que su dueño.
