MANDELA martes 18 de octubre de 2016
ELOGIO DE LA MEMORIA
FACTOR MANDELA 18
Brand y Van Sitter recibieron órdenes de pasear a Mandela por Ciudad del Cabo. Botha temía que todo el gobierno se enterara de las negociaciones y se filtrara el asunto a la prensa. Sin embargo les parecía importante ir aclimatando la vida fuera de la cárcel. Autorizaron a los guardias para que lo dejaran salir a dar pequeños paseos y se mezclara con la población desprevenida.
Dos guardias lo llevaron a una ciudad llamada Paternoster a cien kilómetros de la Ciudad del Cabo. El podría haberse precipitado hacía un autobús repleto de turistas alemanes en busca de asilo político. Pero él todavía no quería salir de la cárcel. Le parecía que podía hacer más si se quedaba dentro y negociaba.